La Asociación
La Asociación Cultural y Recreativa El Castillo es una entidad sin ánimo de lucro. Creada en el verano de 1994 e inscrita en el Registro General de Asociaciones de la Comunidad Autónoma de Aragón en 1995, hoy contamos con un número cercano a los 800 socios.
Nuestro ámbito de actuación territorial es puramente local y se limita al municipio de Langa del Castillo, aunque nuestro interés y determinación no están en absoluto limitados. Trabajamos en pos de la realización de actividades que promuevan la cultura, el ocio, el entretenimiento y la relación social de todos los que, directa o indirectamente, formamos parte de la comunidad de Langa del Castillo, comunidad mucho más amplia que su mero número de habitantes.
Estamos convencidos de que promover acciones que incorporen elementos de cultura, tradición, entretenimiento, diversión y participación social, tomados separadamente o fusionados, pueden llevarnos a la creación y sostenimiento de vínculos con Langa que generen un sentimiento de identidad y colaboren en el fortalecimiento del sustrato básico del desarrollo del pueblo.
Nos interesan especialmente las singularidades de Langa, siempre situadas en un contexto general. Nos miramos el ombligo, sí, pero siendo conscientes del resto del cuerpo. Nos gusta lo rural, el conocimiento del otro, los saludos en la calle, la proximidad, la participación en lo común de niños, adultos y mayores, el “hijo, y tú de quién eres”; también el disfrute de la gastronomía, el paisaje, el campo y la relajación de las normas urbanas.
Desde la humildad a la que nos fuerzan nuestros escasos recursos y con solo una pizca de vanidad que nos ayuda a impulsarnos, llevamos a cabo distintas acciones a lo largo del año. Intentamos hacerlo de una forma desestacionalizada para no perder el ritmo y buscando siempre el interés general y la mayor participación. Editamos la revista semestral El Prau, conservamos celebraciones tradicionales como la hoguera de San Antón o las culecas, incentivamos los juegos infantiles, estimulamos la lectura, mantenemos una pequeña biblioteca a la que llamamos “Biblioteca Peregrina”, tenemos una relación muy especial con la poesía, a la que llevamos a las puertas de nuestras casas, promovemos charlas y talleres de distinta naturaleza, organizamos exposiciones en la calle, fomentamos la música y el teatro con diversas actuaciones y no nos olvidamos de las actividades deportivo-culturales. Ah, que no se nos olvide, y cultivamos con pasión lo que podríamos llamar gastronomía sociocultural.